Mario Román nos explica a través de su blog en Enduro21 el infierno que pasó en Serbia, durante la disputa del Xross Hard Enduro, segunda prueba del HEWC 2022, donde tras destrozarse un dedo del pie contra un tocón, tuvo que sobreponerse a un calvario de tres días para arañar puntos y no descolgarse en su lucha por el Mundial.

A pesar de ello, el piloto del equipo Sherco suma 6 valiosos puntos que le permiten no descolgarse en la lucha de un campeonato que lideraba tras ganar la primera cita, el Minus 400, en Israel. Mario ya piensa en la próxima batalla, el Erzbergrodeo, donde el mítico ‘Gigante de Hierro’ volverá a sentir el rugir de miles de motos del 16 al 19 de junio…

Todo empezó bien en Serbia: 3º en el ‘Straight Rythm’

“El Xross Hard Enduro de Serbia empezó muy bien para nosotros. Esta era la segunda vez que hacíamos el ‘Straight Rythm’ esta temporada, una prueba de dos en dos, por eliminatorias, y la verdad es que está muy divertido el formato".

"Aunque también es verdad que, en esta ocasión, fue un poco peligroso, ya que había una barra de equilibrio a alta velocidad y hubo varios accidentes entre los pilotos Pro. Uno de ellos casi se mata, literalmente. Y otros dos, salieron despedidos y por suerte no se hicieron nada”

"Quitando eso, fue una prólogo muy intensa. Me tocaron tres duelos. Uno de estos con Lettenbichler. Fue muy difícil, pero al final gané. Me tocó ir a tres, tanto con Letti como con Cyprian, porque en este tipo de enfrentamiento tienes que ganar dos carreras para pasar al siguiente duelo."

"Hay dos lados paralelos, el izquierdo y el derecho, y estos no siempre son iguales. Así que, como en el saque de tenis, para tener la oportunidad de que ambos jueguen a uno y otro lado, te cambias de lado".

"Luego, con Alfredo, también me tocó ir a tres carreras. Me ganó y pasó a la final. Así que hice tercero y me fue muy bien. Estoy contento de haber batido a Letti y de que me faltará muy poco para hacerlo con Alfredo, estando ahí. Estoy muy satisfecho del trabajo tan notable que estamos haciendo en el SuperEnduro y con toda la mejoría”.

Hasta que el tocón de un árbol se cruzó en su camino

“Como habíamos hecho entrenamientos cronometrados por la mañana, el orden de partida fue según estos y no según cómo habíamos terminado el día anterior en la prólogo". 

"Salí cuarto. El primer tramo de carrera era súper rápido, así que salí al ataque, pero cuando apenas llevaba 5 minutos en moto, me comí un tocón [N. R: la base de un árbol talado] que estaba cerca del sendero y no pude ver". 

"¡Cómo de fuerte debía ser el impacto que salí volando de cabeza, dando una voltereta! De hecho, pensé que me había roto el pie entero porque no lo notaba..."

Un dedo literalmente aplastado

“A todo esto, salíamos cada 30 segundos. Venía Letti y lo dejé pasar. Y obviamente, apreté los dientes y me dije que esto es el Mundial, que debía seguir a tope y que no podía pararme a ver qué tenía. Fui pensando en la lesión y esperando que no fuera muy grave, y que ojalá no hubiera explotado la piel ni que el hueso estuviera fuera… Bueno, lo de siempre".

"Y nada, llegamos al repostaje, me tomé un anti inflamatorio y seguí en carrera. No quise mirarme la bota hasta que terminé. Cuando acabé, me la quité y vimos que había sangre y que tenía todo el calcetín pegado, y que había habido un estallido del tercer dedo, el del medio, de mi pie izquierdo". 

"Fui al hospital, me hicieron una radiografía y vieron que tenía la última falange rota en tres. Por suerte fue una rotura pequeña y, por ahora, no hay que operar. Así que decidí seguir para conseguir puntos como fuera para el campeonato. Obviamente, entonces, la idea de ganar el evento o intentar luchar por el podio, se había esfumado, pero quería tratar de hacerlo lo mejor posible, tratando en todo momento de no agravar la lesión”.

Un calvario de tres días de dolor 

“Un compañero me dejó una bota del 45 para evitar que el dedo tocara con la punta de la bota y evitar de ese modo todo el dolor que ello suponía". 

"El día antes, de 8 de la mañana a 1 de la tarde había sufrido un dolor infernal. Aunque luego, con una bota más grande, un vendaje y fijando con esparadrapo el dedo al sano de al lado, hizo que pudiera correr bastante bien, con ayuda sólo de un anti inflamatorio y sin ningún calmante. Lógicamente, me dolía, pero traté de no dar grandes pisotones en el suelo y pilotar de la forma más suave posible, sin caídas ni nada". 

"¡La segunda jornada fue una ‘fakirada’!, con 7 horas 20 minutos. Se me hizo muy duro, casi eterno. Pero lo conseguí y llegué a meta muy contento. La última jornada ya fue un día de supervivencia, fue cortita, de menos de cuatro horas. El trabajo ya estaba hecho, así que traté de no cometer errores y llegar simplemente hasta el final”.

Suma valiosos puntos de cara al Mundial de Hard Enduro

“Estoy muy satisfecho de haber podido sumar 6 puntos, los cuales no cabe decir que son muy valiosos de cara a la lucha por el campeonato. Ahora mismo voy cuarto. Los dos primeros clasificados están empatados a 30 puntos, el tercero tiene 27, yo 26 y Wade, si no me equivoco, 22…"

"Eso significa que aún todo está en juego y que todavía queda mucho año por delante. Tengo que dar las gracias de haber salido de una situación así sumando unos buenos puntos y, obviamente, con una lesión ‘leve’”.

Una semana de ‘descanso’ con Sherco en Indonesia

“Ahora voy camino de Indonesia, donde tengo un compromiso y un evento internacional. Lo bueno es que no tengo que competir ni entrenar allí, así que voy a estar tranquilo, descansando, atendiendo a los fans y conociendo mundo mientras me pongo hielo en el pie…"

"La semana que viene, cuando vuelva, valoraremos cómo está la herida, que a día de hoy está abierta, y miraremos que no se haya infectado y que todo va correcto. Y si es así, empezaríamos ya con la recuperación, con una semanita más de cara al Erzbergrodeo”. 

Fotos: Andrea Belluschi | Future7Media