Tras haber competido en la Red Bull Romaniacs, los ISDE y el Campeonato del Mundo de Trial en 2021, Sandra Gómez ha confirmado que también estará en el Rally Dakar 2022 – Enduro21 entrevista a la polifacética piloto madrileña para saber más detalles sobre su nueva aventura.

La única mujer que ha terminado la Red Bull Romaniacs en la categoría Gold, Sandra Gómez, nos pilló a todos por sorpresa cuando, a dos días de que arrancará Hixpania Hard Enduro 2021, anunció que participaría en el Rally Dakar 2022.

Desde Enduro21, queríamos saber más sobre cómo ha surgido esta oportunidad y cómo le fue en su primer rally en Marruecos, además de saber si eso significará su adiós del hard enduro o si seguirá compaginando esta nueva disciplina, con el enduro y el trial.

El único ‘Rally’ que habías hecho hasta ahora era Romaniacs y, de repente, dices que vas al Dakar… ¿cómo llegó esta oportunidad?

Sandra Gómez: “Cuando empezamos a plantearnos la temporada, viendo a que carreras iríamos y qué logística necesitaríamos, es cierto que el Dakar no era el objetivo. Entre mayo y junio lo estuvimos hablando con mi hermano [Alfredo] y Lorenzo Santolino, que es como si fuera otro hermano para mí, y les dije que tarde o temprano quería ir”.  

“Todo se planteó muy rápido, entre finales de agosto y principios de septiembre. Antes de que volviera a arrancar el Mundial de Trial, hablé con Santolino y decidimos intentar ir. Me ha ayudado en todo, sin él esto no hubiera sido posible. Aunque no lleve mucho tiempo, ha aprendido rápido. Y prueba de ello, fue el quinto puesto que consiguió en la pasada edición”. 

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“La idea fue esa más que nada. También llevaba tiempo hablándolo con uno de mis sponsors, siempre han querido tener un piloto allí y estaban encantados de que fuera yo. Por eso mi moto irá pintada entera con sus colores: Clínicas Cres”. 

“Todo ha surgido en base al apoyo de mi familia, el de Santolino y a que Cres, ha dicho: ‘¡venga vamos!’”.

¿Es algo que llevabas planeando hace mucho tiempo o los astros se alinearon a última hora? A nosotros nos pilló por sorpresa.

“Es algo con lo que siempre había soñado. Creo que todo el mundo que monta en moto y ha visto el Dakar por la tele, se ha dicho; ‘¡yo quiero estar allí algún día!’. Este año, mis objetivos eran Erzbergrodeo, que se canceló, y luego hacerlo lo mejor posible en el Mundial de Hard Enduro y en Romaniacs”. 

“Mi objetivo no era para nada el rally, todo surgió muy deprisa. He de decir que, a mí, también me pilló un poco todo por sorpresa”. 

El Enduro Extremo y los Rally-Raids tienen muy poco que ver, ¿cómo ha sido dar el salto a las carreras de desierto?

“Ya sabéis que me gustan los grandes retos y que quizás, preparar un rally con un año y medio de antelación, se me haría un poco bola. No quiero las cosas para ya, pero me conozco. Ya me pasó la primera vez que fui a Romaniacs, todo el mundo me decía que estaba loca y acabé en el hospital con una bajada de azúcar. Pero el objetivo de ese año no era acabar, era probar y ver qué era posible a la segunda o a la tercera vez. Es también lo que llevo haciendo en la Erzberg, son carreras que necesitan paciencia”. 

“El Dakar tampoco me lo planteo así, mi objetivo es acabarlo. El Rally de Marruecos fue diferente. Fuimos a ver si me gustaba y a entrenar el roadbook. Era un poco como un test para ver si estaba capacitada para afrontar el gran reto de ir a por el Dakar”. 

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“Es verdad que el hard enduro y los rallies tienen poco que ver, pero en ambas disciplinas pasas muchas horas encima de la moto. Al final, también es una moto y hay que pilotarla”.

“Ha sido difícil y fácil a la vez, había cosas que pensaba que me costarían mucho más y otras que menos. La moto es muy grande, sobre todo la primera vez que te montas en ella, pero se maneja mejor de lo que parece”. 

“Aún estoy aprendiendo, pero me siento cómoda con ella. Cada vez se me da mejor mirar el roadbook e interpretarlo sin tener que estar mucho rato mirándolo. Vamos poco a poco y me voy adaptando”. 

¿Qué tal la primera toma de contacto en el Rally de Marruecos?

“Fue muy bien, la verdad. Estaba muy nerviosa porque era como adentrarse en lo desconocido. Hacía mucho tiempo que no competía en algo que no sabía cómo iba. Una vez empezó todo, me di cuenta de que Santolino me había enseñado bien y que lo tenía todo bajo control”. 

“Me lo tomé con mucha calma, yendo a mi ritmo, sin pasarme ningún un ‘waypoint’ ni cometer errores de lectura en el roadbook. Pensaba que las horas en moto se me harían más largas, pero al final me ha gustado”. 

“Es totalmente diferente. A medida que iba aprendiendo, cogiendo ritmo y tenía la navegación cada vez más bajo control, lo disfrutaba mucho más”.

“La primera vez, surcando dunas, ¡me encantó! Yo soy más de nieve, y en cierta parte, me lo recordó, sólo que todo era marrón y estábamos a 40 grados”. 

 

¿Qué es lo que más te ha costado? ¿Y lo que menos?

“Por supuesto la navegación. Todavía no lo tengo controlado al 100%, pero sé por donde voy en todo momento, y si me paso o me pierdo, sé volver al camino correcto. Aunque mantener el control cuando no encuentras un ‘waypoint’, es difícil”. 

“En Marruecos, me perdí en una ocasión y tuve que dar media vuelta. Pero cuando miré alrededor, había como 15 pilotos que estaban igual. Ese momento de parar, pensar qué puedes hacer para validar el ‘waypoint’ y seguir, es lo que más cuesta”. 

“Creo que lo estoy llevando bien e intento aprender todo lo que puedo sobre cómo interpretar todas las notas. Sé que es lo que más me va a costar en el Dakar, pero por ahora lo llevo bien. El equipo de XRaids, junto a Jordi Grau y Lorenzo Santolino, me están echando una mano y llevo ya un buen curso intensivo encima”.

“En cuestión de pilotaje, que la moto pese tanto, me cuesta. No estoy acostumbrada a que te venza al pasar unas piedras”.

“Lo que menos me ha costado, en verdad, son las dunas. Practiqué un poco alrededor del vivac y le pregunté a la gente cómo tenía que pasarlas y cómo hay que atacarlas. Probé todas las maneras de afrontarlas para saber qué podía pasar y cómo sacar la moto si se quedaba atascada. A pesar de ello, se me ha dado mejor de lo que esperaba y me lo he pasado genial”. 

¿Es muy diferente el ambiente del vivac comparado con el paddock de un enduro extremo o hay la misma camaradería?

“Ya sabéis que en el enduro extremo todos tenemos muy buen rollo en el paddock y más aún en el equipo de ZonaPaddock”. 

“Conozco a poca gente en el vivac, pero en Marruecos empecé a conocer más, sobretodo españoles. Me dieron algún que otro consejo, y eso se agradece muchísimo, porque entré allí sin tener ni idea sobre la disciplina y eso ayuda mucho”. 

“Es verdad que, en el Hard Enduro, los pilotos Pro confraternizan más. En el Rally son más difíciles de ver por el paddock. En una Hixpania, por ejemplo, puedes encontrarte con mi hermano o Mani Lettenbichler y charlar con ellos”.

Estas acostumbrada a muchas horas en moto durante las carreras de hard enduro, ¿te ha ayudado eso en el rally?

“Sí que me ha ayudado. Ya lo había hablado con pilotos que corrían el Dakar. Mi cuerpo después de una Romaniacs está destrozado. Aquí es diferente, no tengo el cuerpo morado después de una semana, pero sigue siendo agotador”. 

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“La manera de estar concentrado también es totalmente diferente. Yo siempre digo que el trial es la disciplina donde más me ha costado permanecer concentrada. Tienes que estar a tope un minuto y medio, luego despejarte y volver a estar a tope. Eso así treinta veces”. 

“Creo que las carreras de Hard Enduro van mejor conmigo, los resultados que he obtenido estos últimos años así lo demuestran. En el rally, tienes que pensar diferente. Tienes que estar muy concentrada en los números, pero no tienes que pensar cómo atravesar un paso como en el hard enduro. En los raids tienes que pensar rápido, aunque no tanto en cómo mover el cuerpo, si no en qué rumbo tomar”. 

“Evidentemente, el haber pasado muchas horas encima de la moto, creo que me ha ayudado, aunque creo que ambas no son comparables. No es que una disciplina canse más o menos, simplemente son diferentes”. 

¿Qué objetivos tienes en el Dakar? ¿Con qué estructura irás?

“Está claro que es terminar, soy una novata novatísima. Tendré la clasificación femenina en mente. Siempre se dice que es una carrera en la que pueden pasar muchas cosas y he visto que eso es totalmente cierto. En un rally, bajas la guardia, te pierdes y es muy difícil de recuperar”. 

“Lo principal va a ser estar muy encima de la navegación, no cometer errores y pilotar sin fallos. Sin jugármela. Siempre con la idea de llegar a meta”.

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“Voy con el equipo de XRaids, el equipo en si se llamará XRaid Cres (mi principal patrocinador). Aún estoy buscando más sponsors, ya que todo ha sido un poco precipitado. Espero que aparezca algo de aquí al Rally Dakar”. 

¿Es un adiós al enduro extremo o solo un hasta pronto?

“Para nada será un adiós. Aún me quedan muchas cosas por hacer en el Hard Enduro. Como objetivo para el año que viene me gustaría acabar la Erzbergrodeo, una prueba que todos tenemos muchas ganas de que se vuelva a celebrar”.

“También me gustaría mejorar los resultados en las carreras que ya he terminado. En Romaniacs he conseguido llegar a meta dos años en Gold y, ahora, me gustaría ir a darlo todo y ver de lo que soy capaz en esa categoría. Creo que me queda mucho por demostrar en esa carrera”.

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¿Qué equipación llevaste? ¿Difiere mucho el equipo de raid del que llevas a una carrera extrema?

“Algo parecido a lo del hard enduro, aunque quizás llevas puestas menos cosas. Por ejemplo, vamos sin mochila.  Llevé el pantalón de Leatt con bolsillos que se ha vuelto mi favorito y las rodilleras Donjoy de siempre”.

“Las botas también fueron unas Leatt, aunque con clips rígidos en vez de flexibles como los que llevamos en el hard enduro. La protección que he usado ha sido de la marca Furygang. En la parte superior, llevaba la chaqueta de Leatt que es como un cortaviento”.

“Lo que más difiere es el airbag, que no lo usamos en hard enduro, y aquí en el rally tampoco se puede llevar el protector del cuello. Las suelas de las botas aquí son más rígidas. En cuanto a las gafas, siempre suelen tener un cristal para el sol, algo que casi nunca usamos en el enduro extremo”.

Modo Hard Enduro / Enduro Tradicional:

Modo Rally:

 

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Fotos: Future7Media + RallyZone